29/01/2025
Estos principios son clave para evitar errores y asegurar que la medicación se administre de manera adecuada. Aquí te los comparto:
Correcto paciente: Asegurarse de que el medicamento se administra al paciente adecuado.
Correcto medicamento: Verificar que el medicamento es el indicado para el tratamiento del paciente.
Correcta dosis: Confirmar que la cantidad de medicamento es la prescrita y adecuada para el paciente.
Correcta vía de administración: Asegurarse de que el medicamento se administre por la vía indicada (oral, intravenosa, tópica, etc.).
Correcto tiempo: Verificar que el medicamento se administre en el momento adecuado y según el esquema horario.
Correcta frecuencia: Administrar el medicamento con la frecuencia indicada (por ejemplo, una vez al día, cada 8 horas, etc.).
Correcta documentación: Registrar correctamente la administración del medicamento en la historia clínica o en el sistema correspondiente.
Correcta reacción o monitoreo: Observar al paciente para detectar cualquier efecto adverso o reacción no deseada al medicamento.
Correcta información: Asegurarse de que el paciente o su familia tengan la información necesaria sobre el medicamento, incluyendo su propósito y posibles efectos secundarios.
Correcto seguimiento: Verificar la efectividad del medicamento y hacer ajustes si es necesario, basado en la respuesta clínica del paciente.