26/11/2025
DESPUÉS DE LOS CINCUENTA
Después de los cincuenta,
ya no puedes soportar las restricciones...
No soportas los sujetadores ajustados,
las cenas obligatorias con tu cuñada q
ue inspecciona el polvo en cada rincón,
los tacones altos en caminos rocosos
o las sonrisas circunstanciales...
A los cincuenta, ya no quieres demostrar nada.
Eres quien eres, las cosas que has hecho
y las cosas que aún quieres hacer.
Si a los demás les parece bien, genial.
Si no, es lo que hay...
Después de los cincuenta,
no importa si tienes hijos o no;
seguirás siendo madre, tu madre,
tu padre, una tía solitaria, tu perro
o un gato calvo que rescataste de la calle...
Y si no tienes nada de eso,
serás tu propia madre porque,
con los años, habrás aprendido a cuidar
un cuerpo que finalmente has llegad
o a amar, uno que se vuelve
más imperfecto,
pero solo a los ojos de los demás...
¿A quién le importa si la mitad de
tu guardarropa es de la talla equivocada?
Lo que importa es que tu espalda
no cruja demasiado cuando te levantas,
que no sientas bultos al tocarte los senos
y que la menstruación finalmente
se convierta en un problema ajeno...
Después de los cincuenta,
quieres libertad:
libertad para decir que no, l
ibertad para quedarte en pijama
todo el domingo, libertad para sentirte
hermosa por ti misma
y no por los demás...
Libre para caminar sola;
los que te quieren caminarán contigo,
los que se preocupan
por las apariencias...
Eres libre de cantar en voz alta
en tu coche, aunque la gente te mire
en los semáforos.
Ya no tendrás que revisar
los expedientes escolare
s ni aguantar los chats de madres...
Después de los cincuenta,
no importa si tienes hijos o no;
tendrás sueños
como cuando tenías veinte años
y le pedirás a Dios cada día
tiempo para lograr más...
Habrás dicho adiós
a los hombres que amaste
y a las inseguridades que alguna vez
te hicieron temblar...
Y ahora, justo ahora,
después de devorar
la mitad de tu vida a grandes
y apresurados bocados,
descubrirás el deseo
de saborear lentamente
toda la dulzura y la sal de los días
que te quedan por delante...
~Jr Arenivas