10/12/2025
Viajar con un niño con diabetes no es simplemente “hacer la maleta”.
Es repasar mentalmente todo lo que podría pasar… y prepararte para cada escenario.
Mientras otros solo empacan ropa, tú empacas tranquilidad:
tirillas, sensores extras, juguitos, pastillas de glucosa, jeringas, cargadores, repuestos, snacks calculados, notas del médico, y ese pequeño “por si acaso” que solo tú entiendes.
Porque viajar no da miedo… da miedo olvidar algo importante.
A veces la parte más difícil no es el trayecto, ni el destino, ni las horas de espera.
Lo difícil es esa vocecita interna que te pregunta una y otra vez:
“¿Llevo suficiente?”
“¿Y si baja?”
“¿Y si se pega el sensor?”
“¿Y si el vuelo se retrasa?”
“¿Y si no encuentro comida adecuada?”
Y aun así, aun con esos nervios silenciosos, tú haces que el viaje se sienta normal para él.
Él empaca su peluche…
y tú empacas su seguridad.
Él piensa en la aventura…
y tú piensas en mantenerlo estable sin que pierda su emoción.
Porque cuando lo esencial va contigo, cuando llevas su kit listo, cuando sabes qué decir en el aeropuerto y cómo pedir apoyo… el viaje cambia.
Ya no es estrés puro:
es organización, previsión y amor convertido en pequeños detalles.
Un viaje tranquilo no depende del destino…
depende de la calma con la que llegan.
Depende de que él se sienta seguro
y tú sientas que hiciste todo lo posible.
Y cuando por fin ves su carita mirando por la ventana del avión, emocionado, feliz, sin preocuparse por nada…
ahí entiendes que todo el esfuerzo valió la pena.
💛 Cuéntame:
¿Qué es lo que más te preocupa a ti cuando viajas con él?
Tu experiencia ayuda a otras mamás también. 💙✈️
Dra. Silvia Cappelletti
Endocrinóloga Pediatra
DGP 5858698
DGP Endopedia 10861434
Permiso Cofepris 213301202A1204
Citas al 3327963475