18/11/2025
Tu mayor revolución será ser un adulto emocional. El adulto ya no entra en juegos de poder, manipulaciones, dramas o demostraciones. Al adulto emocional solo le interesan tres cosas: 1. Su paz. 2. Su realización. 3. Ser útil. Entonces, ¿qué ocurre cuando una persona adulta emocionalmente convive con un entorno familiar, social o laboral tóxico? Que deja en evidencia a los que están en el estado “niño enojón” quejándose de todo y de todos o en el estado “adolescente rebelde” peleándose con todo y con todos. ¿Y qué hacer cuando es un progenitor, un hermano, un compañero de trabajo, un jefe o la propia pareja? Con amor, dejar con ellos su responsabilidad aunque no la quieran coger. El adulto emocional renuncia a llevar responsabilidades que no le son propias, a riesgo de que eso suponga una “ruptura” de la relación o un distanciamiento. Ser adulto supone muchas veces, sostener la soledad del que deja de jugar a juegos psicológicos que solo conducen al sufrimiento. Esa es la parte heroica del adulto, prefiere la soledad a la pertenencia “a cualquier precio”. En mis formaciones de Tarot y Árbol Genealógico podemos observar las dos trampas psicológicas más poderosas que lanza una familia. O bien hacernos creer que los necesitamos o bien hacernos creer que nos necesitan. Hay hijos dependientes de sus padres e hijos super pendientes de sus padres. El hijo adulto, es autosuficiente y humilde a partes iguales. Es decir, no espera, ni tampoco pide nada a sus padres y a su vez los reconoce como grandes, sabiendo que ellos se sostienen en sus almas. Quiero darte un ejercicio poderoso. Visualiza frente a ti a tus padres y diles una frase sanadora: “Renuncio a depender de vosotros. Renuncio a vivir pendiente de vosotros. Siempre seré vuestro hijo, a partir de ahora, adulto”. Respira.
Red📝