Mikao Usui fue quien descubrió el Reiki durante un retiro espiritual a mediados del siglo XIX, aunque él siempre afirmó que únicamente redescubrió una técnica de sanación milenaria que ya existía pero que debía llevar mucho tiempo olvidada. Práctica
La práctica del Reiki se fundamenta en un emisor o canal que, mediante sus manos, transmite Reiki (energía vital) a un receptor que puede ser él mismo u otra persona con el fin de paliar o eliminar molestias y enfermedades; no obstante, gracias a que Reiki es una energía universal los tratamientos también pueden dirigirse a otros seres vivos como animales e incluso plantas. Los efectos curativos del Reiki parten de los conocimientos hinduistas sobre los Chakras, mediante los cuales explican los estados de salud de los seres humanos. De esta forma, el mal funcionamiento o bloqueo de uno o varios Chakras provoca o agrava el mal estado de salud dando lugar a enfermedades y trastornos. La energía Reiki se dirige a estos chakras cuando se aplica a un receptor enfermo, desbloqueándolos y potenciando el proceso de recuperación del receptor. Aunque Reiki es una técnica de sanación, no se recomienda utilizarla como sustituto del tratamiento médico prescrito por un profesional, aunque sí se puede utilizar de forma complementaria. Los Cinco Principios del Reiki
El doctor Mikao Usui estableció una filosofía para el Reiki basada en los Principios del emperador Meiji , e invitó a sus alumnos a seguirla. Éstos son los Cinco Principios del Reiki:
Sólo por hoy no te preocupes
Sólo por hoy no te enojes
Honra a tus padres, maestros y ancianos
Gana tu pan honradamente
Muestra respeto y gratitud hacia toda forma de ser vivo