03/12/2025
Muchas veces usamos estos términos como si fueran lo mismo, pero en realidad describen patrones de conducta distintos. Entenderlos puede ayudarnos a reconocer lo que nos pasa y buscar apoyo adecuado.
🔥 ANSIEDAD
• Se siente como una ALARMA INTERNA que se activa ante posibles amenazas.
• El cuerpo se pone en modo alerta: corazón acelerado, tensión, preocupación constante.
• La persona suele EVITAR SITUACIONES para escapar del malestar.
👉 Ejemplo: no salir de casa por miedo a un ataque de pánico.
🌑 DEPRESIÓN
• Se parece más a un APAGON EMOCIONAL: falta de energía, motivación y ganas de hacer cosas.
• Las actividades que antes daban placer ya no generan interés.
• La persona reduce su participación en la vida cotidiana.
👉 Ejemplo: dejar de ver amigos porque “ya nada me hace sentir bien”.
💡 LA CLAVE
• ANSIEDAD = exceso de activación y acciones para evitar situaciones, emociones, pensamientos.
• DEPRESIÓN = déficit de actividad y pérdida de gratificantes, así como baja motivación.
Ambas son experiencias humanas que no se explican solo con etiquetas médicas, sino con las situaciones y consecuencias que las mantienen. Por eso, los tratamientos efectivos buscan cambiar esas relaciones:
• En ansiedad → aprender a exponerse y tolerar la activación.
• En depresión → recuperar actividades que vuelvan a generar bienestar.
✨ Recordemos: hablar de ansiedad o depresión no es hablar de “debilidad”, sino de patrones de conducta que podemos comprender y transformar.