06/02/2025
TRATAMIENTOS BREVES.
Muchos pacientes esperan que un tratamiento psicoterapéutico sea no sólo eficaz sino breve. El análisis, sin embargo, ha mostrado que los padecimientos del sujeto fueron gestados y consolidados a lo largo de muchos años, por lo que difícilmente puedan superarse sin un trabajo cuidadoso que requerirá cierto tiempo para acceder a sus causas(1). Es frecuente, no obstante, que el solo hecho de recibir atención produzca bienestares que pueden confundirse con mejoras duraderas. Es conveniente que quien consulta tanto a un analista como a quien sea que ofrece atención psicoterapéutica haga una ponderación realista de los problemas que enfrenta y entienda la naturaleza del trabajo que deberá realizar para resolverlos.
La difusión que tiene en la sociedad el recurrir a psicólogos, psiquiatras y otros especialistas ha popularizado prácticas que aun siendo distintas entre sí son vulgarmente consideradas afines. Las limitaciones económicas, las reales y las imaginadas (que las hay) alimentan la propagación de sistemas de atención de bajo costo, pretendiendo, además, que el tiempo que ésta insuma sea muy breve.
Está la recomendación de Lacan de que antes de comenzar un tratamiento psicoanalítico se debe “introducir al paciente a una primera ubicación de su posición en lo real”(2). No se trata de enseñar al consultante en qué consiste verdaderamente realidad alguna, sino de que tenga una primera composición de lugar acerca de los padecimientos y cuestiones que lo llevaron a la consulta. Lacan llamó a esto, siguiendo a Freud, “sistematización de los síntomas” , que después podrá ser ajustada, enriquecida o corregida. Este primer paso es necesario para que el consultante entienda la tarea que tendrá que llevar a cabo y se comprometa consigo mismo al respecto si así lo decide.
Raul Courel /Psicoanalista