17/10/2020
La Terapia de Aceptación y Compromiso o terapia de jardín con suculentas forma parte de las llamadas Terapias de Tercera Generación (la primera generación de terapias fueron las que se centraban en cambiar directamente la conducta; la segunda generación fueron las que incorporaron la importancia del pensamiento). El principio general de las terapias de tercera generación es que hay una cosa que es más importante que las conductas en si mismas: en contexto en el que ésas se producen. Por eso también se las llama terapias contextuales. El mindfulness también se incluye en esta categoría.
Concretamente la Terapia de Aceptación y Compromiso se centra en el hecho de que la lucha encarnizada contra el malestar hace que este malestar aumente. Explica el Trastorno de Evitación Experiencial diciendo que las personas tenemos tendencia a evitar el malestar, olvidando que esa experiencia forma parte de la vida, por más desagradable que sea. Y que cuanto más nos esforzamos en huir del sufrimiento, más sufrimos.
Si supiera que el mundo se acaba mañana, yo, hoy todavía, plantaría un árbol", decía Martin Luther King. En su caso, la jardinería significaba esperanza. Para el pintor Claude Monet, su jardín era un símbolo de amor, pues en él depositaba sus ilusiones. Einstein decía que mirar en la naturaleza ayuda a comprender todo mejor. Para cada uno, la relación con las plantas se traducía en un estado mental diferente.
El cuidado de la planta supone beneficios psicológicos:mejora el estado de ánimo, reduce los niveles de ansiedad, aumenta la autoestima al conseguir una recompensa por el esfuerzo, ayuda a desarrollar la paciencia, estimula la memoria y por supuesto nuestra necesidad de cuidado y éxito.
podemos nosotros tener en casa un espacio relajante, donde sentir su influencia y beneficios, puedes aprovechar un pequeño rincón del balcón, una terraza, un jardín, pero también una habitación del interior de la casa, establecer qué queremos hacer , que propósito tendrá y de que será testigo, individual o de la familia.
las plantas representan las actividades diarias y las relaciones. Trabajamos para cuidarlas y que den buenos resultados, sabiendo que estos no siempre serán óptimos porque dependen de muchas cosas. Las malas hierbas son los problemas que, de acuerdo con el Trastorno de Evitación Experiencial, intentamos arrancar de cuajo, pero eso no los hace desaparecer. Y cuanto más nos dejamos dominar por esa lucha, más descuidamos las cosas que nos importan.
la Terapia de Aceptación y Compromiso es tener una planta suculenta y comprometerte con cuidarla para que crezca y dé flores. Sabiendo que los problemas están, pero sin permitir que ocupen todos tus esfuerzos.