27/07/2023
La prevalencia de los episódios de presíncope y/o síncope(predesmayos o desmayos) entre la población a nivel mundial, es en promedio del 30% . Sin embargo, a pesar de que se puede presentar desde la infancia, es frecuentemente no atendido, mal diagnosticado o catalogado simplemente como tener “presión baja” entre los pacientes mismos. Aún y cuando su naturaleza es benigna, la causa más frecuente de estos síncopes , es el Síncope Vasovagal, que se caracteriza por ser intermitente (en ocasiones pasan meses o años entre episodios o el paciente “se acostumbra” a sentirlos y ya no los considera un problema). Los síntomas de alerta para pensar que pueda padecer Síncope o presíncope vasovagal son más frecuentemente: palpitaciones, taquicardias, sentir episodios de mareo, debilidad o fatiga muy fácil con esfuerzos que otras personas toleran con facilidad (es muy común que al paciente con esta enfermedad “no le guste o no tolere hacer ejercicio o deporte aeróbico al mismo nivel que sus hermanos o amigos de la misma edad), palidez, sudoración, visión borrosa, sensación de desmayo o desmayo. Es muy frecuente que esta enfermedad (el Síncope Vasovagal, antes conocido como Síncope Neurocardiogénico) sea heredado de padres a hijos o sea adquirido, posterior a una infección viral (Covid-19, Catarro común, etc) o exposición a radioterapia por cáncer, entre otras causas. Al tener esta predisposición, generalmente lo que provoca una recaída en el paciente, es un factor disparador, como el simplemente estar mucho tiempo en posición de pie, sentado, el estar en un lugar cálido, húmedo, mal ventilado, muy concurrido por más gente y sin ventilación apropiada (como un elevador), el presentar dolor (como un cólico menstrual, una fractura, un cólico renal), el ver sangre, el sentirse amenazado (como cuando alguien se desmaya porque le van a inyectar o a puncionar para tomarle una muestra de sangre) el hacer un esfuerzo extenuante, levantar peso en el gimnasio o simplemente estar formado en una fila. Es común que el paciente tarde años sufriendo estas molestias, pues “nadie le hace el diagnóstico correcto”. Revísate con un Cardiólogo Electrofisiólogo. ¡Estamos a tus ordenes!.