31/01/2025
esta pieza fue conocida como “Piedra del desmayo”, pues existía una creencia popular de que las personas caían desmayadas al entrar en contacto con la escultura.
Chalchiuhtlicue, la que tiene una falda de jade, era la deidad compañera de Tláloc y tenía poder sobre las aguas terrestres (ríos, lagos, lagunas y mares).
Su escultura, labrada en roca andesita, tiene una altura de 3.19 m y porta un gran tocado rectangular, orejeras, collar con tres sartas de cuentas, huipil, falda y sandalias.
Las referencias a la escultura datan de mediados del siglo XIX, cuando el explorador francés Émile Chabrand tuvo oportunidad de conocerla en su viaje a las pirámides de Teotihuacan.
En esa época se creía que era una mesa de sacrificios dado que sólo podía observarse su parte superior, ya que el resto del cuerpo se encontraba enterrado. En esos años también se la conocía como “Piedra del desmayo”.
Una vez descubierta por completo, fue descrita en 1865 por Ramón Almaraz, miembro de la Comisión Científica de Pachuca. En 1888, el arqueólogo Leopoldo Batres se encargó de trasladar la escultura al Museo Nacional, en el centro de la Ciudad de México.
En 1964, cuando se construyó el Museo Nacional de Antropología, la escultura fue trasladada a sus instalaciones en el Bosque de Chapultepec, donde permanece hasta la fecha como una de las piezas principales de la Sala Teotihuacan.
¡Visítala!
📷 Pamela de la Paz, INAH.