21/03/2022
La quercetina pertenece a un grupo de pigmentos vegetales llamados flavonoides que dan a la mayoría de las frutas y verduras sus colores vibrantes. Al igual que otros flavonoides, la quercetina es un antioxidante que elimina moléculas inestables y altamente reactivas llamadas radicales libres. En niveles altos, los radicales libres pueden dañar las células sanas, las proteínas y el ADN, e incluso causar la muerte celular.
Los radicales libres también juegan un papel causal en la aterosclerosis, que se caracteriza por arterias estrechas y endurecidas. Por lo general, ocurre cuando se acumula un exceso de lipoproteínas de baja densidad (LDL), o colesterol "malo", a lo largo de las arterias, lo que restringe el flujo sanguíneo. Esto, a su vez, eleva la presión arterial y lo pone en riesgo de sufrir un ataque al corazón o un derrame cerebral.
Los antioxidantes funcionan neutralizando los radicales libres, previniendo el daño que causan. Muchos estudios de probeta y en animales han demostrado que una de las formas en que la quercetina mantiene el corazón sano es protegiéndolo contra la aterosclerosis.
Algunos estudios también han demostrado que la quercetina no solo puede reducir el colesterol LDL, sino también aumentar los niveles de lipoproteína de alta densidad (HDL) o colesterol "bueno". El colesterol HDL absorbe el exceso de colesterol LDL y lo lleva al hígado, que luego lo elimina del cuerpo. Como tal, tener niveles saludables de HDL puede reducir el riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular.
La quercetina también ayuda a reducir el azúcar en la sangre. Si no se controla, el nivel alto de azúcar en la sangre puede eventualmente dañar los vasos sanguíneos y los nervios que controlan el corazón. Esta es la razón principal por la que las personas con diabetes, una afección caracterizada por un alto nivel de azúcar en la sangre, también tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades cardíacas y otros problemas cardíacos.
Debido a las propiedades antioxidantes de la quercetina, los expertos también están analizando la quercetina y su potencial para la prevención del cáncer.
Los siguientes alimentos son ricos en quercetina. Considere agregarlos a su dieta para aumentar su consumo de quercetina:
Alcaparras: las alcaparras son los botones florales inmaduros del arbusto de alcaparras. En salmuera o secas, las alcaparras agregan una explosión de sabor a las ensaladas, los platos de pasta y las verduras asadas.
Cebollas rojas: el alto contenido de quercetina de las cebollas rojas compensa con creces su potente olor y su efecto lacrimógeno. Las cebollas rojas se agregan mejor crudas a ensaladas y sándwiches, pero también se pueden saltear, asar a la parrilla o agregar a sopas.
Manzanas: las cáscaras de las manzanas, especialmente las manzanas rojas, están cargadas de quercetina. Cáscaras de manzana asada para hacer chips saludables o prepararlas para hacer té.
Bayas: la quercetina se encuentra en todas las bayas. Mezcle sus bayas favoritas en un batido rico en antioxidantes o utilícelas como aderezo para su avena por la mañana.
Cerezas: la quercetina es el antioxidante más abundante en las cerezas. Cubra su yogur o avena con cerezas para darle más sabor. También puedes reemplazar los postres ricos en calorías como el helado con cerezas.
Col rizada: la col rizada verde y rizada es rica en quercetina. Mezcle con pasta, agréguelo a huevos revueltos o haga chips de col rizada.
Tomates cherry: todas las variedades de tomate son buenas fuentes de quercetina, pero los tomates cherry son los mejores porque tienen la proporción más alta de piel a pulpa. Los tomates cherry son un tentempié sabroso y bajo en calorías.
Brócoli: el brócoli es rico en muchos compuestos beneficiosos para la salud, incluida la quercetina. Cocine al v***r o blanquee los floretes de brócoli para un acompañamiento fácil o realce sus ensaladas cubriéndolas con floretes de brócoli crudo.
Alforfón: el alforfón es más rico en quercetina y otros antioxidantes que otros granos ampliamente consumidos. Los granos de trigo sarraceno se remojan, germinan o fermentan mejor para una digestión óptima.
Té verde: el té verde también es una buena fuente de quercetina. Si no eres fanático de la amargura del té verde, agrega una pizca de jugo de limón fresco o miel cruda a tu té verde para equilibrar el sabor.