Pop Ópticos

24/11/2025

Día Mundial de la Vista: 10 de Octubre 2018

El ochenta por ciento de todos los casos de ceguera pueden prevenirse o tratarse. Ese derecho a ver puede, y debe, volverse realidad.

GINEBRA, 10 DE OCTUBRE DE 2002 — Las cifras, siempre las cifras, esas sombras que intentan medir la desdicha. Dicen que 180 millones de personas caminan por el mundo con una discapacidad visual. De ellas, entre 40 y 45 millones habitan la oscuridad total. Son números que duelen, pero duele más saber que, por el crecimiento demográfico y el simple, implacable hecho de envejecer, estas cifras se habrán duplicado para 2020. Una colosal tragedia humana que se profundizará, teñida de un drama aún más espeso, mientras el desarrollo se estanca y un derecho humano fundamental —el de mirar el rostro de un hijo, el cielo, una página— es conculcado.

El Día Mundial de la Vista es un evento anual que se clava en el problema global de la ceguera. Su misión es abrir los ojos del mundo, no con un golpe de luz, sino con la lenta conciencia de que la prevención y el tratamiento de la pérdida de visión son posibles. Este año, hoy, 10 de octubre, se alza sobre una idea simple y terrible: el derecho a ver. Gira en torno a la promesa de los gobiernos de destrabar el acceso a la salud, a esa frontera donde la prevención y el tratamiento de los ojos se vuelven un acto de justicia. Acceder a la atención oftalmológica, que reduce la magnitud de lo evitable, no es caridad; es la obligación pura que nace del derecho a alcanzar el nivel más alto de salud posible.

Hasta el 80% de los casos de ceguera son evitables. Lo repito: ochenta de cada cien. Un mar de oscuridad que podríamos drenar. Un porque son el resultado de afecciones que podemos anticipar (20%), o porque, simplemente, pueden tratarse (60%) hasta que la visión regresa, como un milagro cotidiano. La prevención y el tratamiento de la pérdida de la visión son quizás las intervenciones más nobles de la salud: eficientes, con resultados que son pequeños renacimientos. Incluyen la cirugía de cataratas, que devuelve la luz a los ojos nublados por la edad; la prevención del tracoma; la distribución de ivermectina para combatir la oncocercosis, esa ceguera de los ríos que viaja y contagia; la inmunización contra el sarampión; la distribución de suplementos de vitamina A para guardar la vista de los niños; y la entrega de lentes correctoras, esas prótesis transparentes que ordenan un mundo desdibujado.

Todo esto existe. Y sin embargo, la sombra crece. Y uno se pregunta, en medio de estas frases y estos datos, por los que se quedaron sin su porción de luz.

Día Mundial de la Vista: 10 de Octubre 2018El ochenta por ciento de todos los casos de ceguera pueden prevenirse o tratarse. Ese derecho a ver puede, y debe,...

23/11/2025

La me encontró en el año #2000, cuando aún no abandonaba del todo la Licenciatura en Comunicación. Había llegado a esa carrera como un animal urgido, hambriento de algo que llenara el vacío de no saber hacia dónde ir. Antes, en la de , había intentado entrar a la Nacional de Pintura y Escultura La , un sueño que duró una semana entera y terminó en resultados fallidos. Regresé entonces con la necesidad a cuestas, no de una vocación, sino de una herramienta: algo que me ayudara a domar el problema del habla que arrastraba desde el nacimiento. Comunicación se presentó como un refugio, un perfil que se ajustaba a mi herida. Y no me arrepiento.

Fue allí, entre las sombras de las aulas, donde conocí la historia de la filosofía, desde Tales de Mileto hasta Sartre, y donde las palabras empezaron a tomar forma en materias como la , el , la literatura latinoamericana. Todo un de lenguaje y pensamiento que, sin embargo, se movía en la relatividad de lo . Ahí me embriague de poesía, literatura y de vino.

Después de cuatro años, la , que ya habitaba en el negocio , comenzó a consolidarse en mí. Durante años, la practiqué como un oficio técnico, hasta que un día, casi sin darme cuenta, me inscribí en la carrera. Y fue entonces cuando la optometría me encontró de verdad, enseñándome a pensar con la frialdad hermosa de lo objetivo, frente a la niebla de lo que había estudiado antes.

Uno de los regalos que me dio esta fue conocer a la Lic. Laura Centeno. Más que su alumno, fui su colaborador en un proyecto que nació de los #21 del . . Juntos diseñamos y elaboramos 21 videos sobre la metodología y aplicación de la visión binocular. Una experiencia que ahora libero, después de siete u ocho años, desde los almacenes polvorientos de mis discos duros, para que otros puedan beber de esa luz.

Una anécdota: aquella vez, invitamos a los compañeros de binocularidad al consultorio de Laura para grabar los videos de los 21 puntos. Nadie llegó. Solo yo, acompañado de mi hija Lia, de ocho años, quien se convirtió en el primer y más valioso paciente para explorar sus ojos llenos de , su funcionalidad motora, sensitiva, acomodativa… Aquello no me dio puntos extra, ni calificación alguna. Lo hice, simplemente, con la pasión que me define cuando creo junto a quienes admiro.

Espero que disfruten este . He decidido, al fin, liberar ese conocimiento, para que la luz ilumine nuestros ojos en una refracción de saberes, y tal vez, desde la optometría, y así, iniciar un diálogo.

En hora buena, saludos, cuatro ojos.

Nota: Lic. Laura centeno. Lia Kury y Elías.

JURAMENTO OPTOMÉTRICODespués de la propia vida, el Don divino más gentil es la vista, y al servicio de este gran Don de la vista, nosotros los optometristas,...

23/11/2025

Cuando empecé con el Programa de Optometría Pública y las pruebas de acomodación, Sentí mucha incertidumbre porque mi vista estaba cansada y me costaba enfocar de cerca, especialmente después de usar el celular o la computadora por mucho tiempo.

Pero al seguir los 7 pasos del examen clínico, poco a poco fui entendiendo qué le pasaba a mis ojos y cómo podía mejorar. La evaluación de mi capacidad para enfocar de cerca fue reveladora y me dio esperanza saber que había un camino para aliviar esa fatiga visual que tanto me molestaba, sobre todo frente al monitor de la computadora y el móvil.

Hoy me siento agradecido porque este método me ha ayudado a recuperar una visión más cómoda y clara, y puedo hacer mis actividades sin tanto esfuerzo ni dolor. Sé que mi vista aún necesita cuidado, pero ahora cuento con las herramientas y el apoyo para lograrlo.

Te recomiendo la óptica del Programa de Optometría Pública, donde la salud visual está enfocada en propiciar una cultura de un ojo sano y una vida segura.

Video: Lic. Laura Centeno, Lia Kury y Elias.

El Programa de Salud Visual Pública es un método de exámen de la vista clínico - funcional en donde ofrecemos al paciente 7 pasos para resolver problemas ocu...

22/11/2025

Propiciamos la cultura de un ojo sano y una vida segura…

28/10/2025

La calidad en la atención visual es crucial, especialmente para pacientes que han experimentado malas experiencias en otras ópticas debido a una atención deficiente. Cuando un paciente visita una óptica, busca no solo una revisión de su vista, sino una atención profesional, confiable y efectiva que garantiza su bienestar visual. La mala calidad en los procesos clínicos, en la evaluación y en el seguimiento puede generar inseguridad y frustración, provocando que busque soluciones en otros lugares sin obtener resultados satisfactorios.

Por eso, en nuestro establecimiento, (Programa de Optometría Pública) la calidad y el servicio son pilares fundamentales. Nos comprometemos a ofrecer exámenes objetivos y precisos, con tecnología moderna y personal altamente capacitado, que garantice un diagnóstico correcto y un tratamiento adecuado. La atención personalizada, la comunicación clara y la empatía con el paciente hacen la diferencia, permitiendo que cada persona se sienta valorada y segura en su proceso. La satisfacción del paciente y la confianza son nuestro norte, y ello solo se logra mediante un compromiso riguroso con la calidad en cada paso del servicio.

Nuestro objetivo es que, después de visitar nuestra óptica, el paciente no solo reciba una evaluación visual precisa, sino que también perciba que su salud visual es prioritaria, recuperando la confianza en la atención oftalmológica. La excelencia en la calidad y el servicio debe ser una columna vertebral en la atención visual, garantizando que cada paciente tenga un resultado que mejore significativamente su calidad de vida.

24/10/2025

19/10/2025

Propiciamos la cultura de un ojo sano y una vida segura.

09/10/2025

Métodos de control de calidad en mi óptica: una poética de la visión

¿Has considerado, alguna vez, que tu , esa trinchera de cristales y monturas, podría ser más que un escaparate de venta lentes? ¿Has sentido el peso de la incertidumbre en las pupilas de tus clientes, en el titubeo de tus ventas, en el eco de una ciudad que parpadea bajo el sol del ? Si alguna vez has soñado con elevar tu a otro nivel, con hacerlo no solo un comercio sino un refugio para la claridad, entonces el control de calidad no es solo una herramienta: es una , un método, una danza científica para conjurar los errores y abrazar la mejora continua.

Piensa en el control de calidad como una investigación, un destello de método científico aplicado a la salud visual. No es solo vender lentes, no es solo ajustar . Es un que respira, que observa, que cuestiona. , ese filósofo de mirada afilada, propuso un método basado en la observación, la hipótesis y la verificación. Y yo me pregunto, en la penumbra de mi óptica, mientras el polvo de Torreón se cuela por las rendijas: ¿acaso no es esto lo que hacemos? Observar el problema, sospechar su origen, verificar su verdad. Resolverlo cuando vemos las sombras de la retina al estar haciendo refracción.

Imagina, por un instante, que tu óptica es un laboratorio. No uno de batas blancas, sino de problemas humanos. Las ventas caen, como gotas de lluvia en el asfalto seco de la pandemia. El -19 ha cerrado puertas, ha nublado perspectivas, ha dejado tus gastos fijos y tu nómina como un peso mu**to en el alma de tu negocio. Según , el primer paso es identificar el problema: las ventas no alcanzan. Luego, la hipótesis, esa chispa de intuición que surge de los datos reales, de las cifras que no mienten. Tal vez el cliente no confía, tal vez el servicio cojea, tal vez el mundo ha cambiado y tu óptica no lo ha notado, talvez hay demasiados en erros en las recetas ópticas, o mala calidad en el producto. En ese sentido, verificar es el siguiente paso: comprobar, con la frialdad de un científico y la pasión de un poeta, qué está fallando. Solo entonces, la solución emerge, como un lente perfectamente pulido. Este último paso cojea los laboratorios ópticos, además del servicio al cliente, cambiando precios por mala calidad.

Pero el de no se detiene en las ventas. Es un sistema que abarca todo: los optometristas, los vendedores, los gerentes, los laboratorios etc. Cada uno con su rol, cada uno con su responsabilidad escrita en piedra, como un poema que no admite improvisaciones. Los procedimientos deben ser claros, obligatorios, sagrados. Y luego está la acreditación, esa carta de presentación que dice: aquí hay profesionales, aquí hay calidad, aquí hay seguridad. Es un sello que no solo valida, sino que humaniza. Porque en Torreón, donde el calor aplasta y la desconfianza a veces acecha, la acreditación es un faro, una garantía de que tu óptica no solo vende, sino que .

Y luego, la categorización. Un que no solo busca la excelencia, sino que la persigue con la obsesión de un narrador que no puede dejar una historia a medias. Auditorías escritas, historiales clínicos revisados con lupa, patrones de evaluación que se tejen como hilos en un tapiz. En el , cada proceso es una estrofa, cada examen de la vista un verso. Los auditores, esos jueces imparciales, usarán encuestas de satisfacción para medir el pulso del cliente, para detectar los errores en el examen visual, para escrutar las técnicas de venta que tu equipo despliega como un actor en el escenario. Estas auditorías no pueden ser un capricho, no pueden teñirse de subjetividad. Deben ser elaboradas por manos capacitadas, por mentes que sepan establecer normas claras, reglas que no se dobleguen ante favoritismos ni percepciones personales. Solo así, los serán objetivos, nítidos, como la visión que prometes a tus .

En el fondo, implementar un método de control de calidad en tu óptica es un acto de resistencia. Es negarte a ser solo un comercio más en las calles polvorientas de . Es negocio en un espacio donde la ciencia, la poesía y la humanidad convergen. Es mirar al con la claridad de un lente bien calibrado, sabiendo que cada resuelto, cada cliente satisfecho, es un paso hacia algo más grande. ¿Estás listo para observar, hipotetizar, verificar? ¿Estás listo para escribir, con tu óptica, una historia que valga la pena contar?