27/10/2019
🌺EL DOLOR DEL PARTO🌺
El dolor del parto es diferente de otros tipos de dolores por varias razones.
Primero porque es un dolor intermitente, viene con la contracción, comenzando débil y aumentando, hasta alcanzar el pic, y aquí es cuando comienza a disminuir y desaparece completamente. En el intervalo entre las contracciones no hay dolor, ni presión, ninguna molestia, es como si nada hubiera pasado hace 4 MINUTOS, en estos intervalos da tiempo de relajarse, meditar, respirar profundamente y a men**o dormir.
Otro hecho es que la intensidad del dolor del parto varía de mujer a mujer y de gestación en gestación por varios factores como:
umbral individual, grado de relajación, intimidad, el medio ambiente, apoyo de familiares y profesionales, preparación y otros tantos... Es un dolor directamente influenciado por factores psicológicos, funcionales y emocionales. Cuando tenemos miedo, nuestra tensión hace que el dolor aumente. Es un ciclo bien conocido, Miedo~Tensión~Dolor, vale para cualquier tipo de dolor.
Un tercer factor que a veces suena extraño es que el dolor del parto es "olvidado", es frecuente escuchar a las mujeres decir que tan pronto el bebé está en los brazos, el dolor ya ha sido olvidado completamente, a diferencia de esos calambres menstruales que recordamos, algunos realmente inolvidables o ese dolor de muelas que destruyó nuestro fin de semana.
Lo cierto es que una buena experiencia de parto significa, entre otras cosas, lidiar con el dolor normal inherente al proceso de apertura del cuello del útero y aliviar o eliminar los dolores innecesarios, procedentes de tensiones, miedos, ambientes inadecuados, maniobras médicas discutibles o la presencia de personas no deseadas.
Y aunque ese dolor es tan peculiar, lidiar con el no es muy diferente que lidiar con otros dolores. Los recursos que podemos utilizar son universales: agua caliente, respiración, distracción, aliento, cariño, apoyo, oscilación rítmica, masaje, relajación, meditación, oración, visualización, presión, estiramiento, respiración, vocalización, movimiento del cuerpo, escuchar música, cantar, gritar, gemir, llorar...p
Por supuesto, no todos los recursos funcionan de la misma manera para todas las mujeres.
Somos individuos diferentes, nuestros deseos, nuestros desafíos, lo que nos mueve, todo es individual. Es bueno recordar que por eso mismo cualquier procedimiento médico relacionado con el parto, no sólo aquellos relacionados con el dolor, deben ser adoptados individualmente y nunca rutinariamente. La rutina es para máquinas, no para personas y menos para parturientas.
Cuando nos sentimos cómodas y seguras, aumentamos nuestra capacidad de relajación y concentración en el trabajo de parto.
El trabajo de parto está hecho de esfuerzo, concentración, dedicación y pasión.
Hay elementos ambientales, recursos humanos y técnicos que pueden ser de gran ayuda en esta intensa tarea de dar a luz a un/a bebé y tener un maravilloso recuerdo de nuestro parto.
Por: Ana Cristina Duarte ~ Comadrona.