07/12/2025
Nombrar lo que necesitas también es un acto de amor
Hay un momento en la vida en el que te das cuenta de que no es egoísmo escuchar tu interior…
es responsabilidad.
Reconocer tus necesidades no te hace débil ni “demasiado sensible”.
Te hace honesta. Te hace humana.
Porque cuando no nombras lo que te duele, tu cuerpo lo grita.
Cuando no dices lo que esperas, tus relaciones se desgastan.
Y cuando te silencias por miedo a incomodar, terminas incomodándote a ti.
Ponerle nombre a lo que necesitas es el primer paso para construir vínculos más verdaderos.
Dios mismo nos creó con deseos, límites y anhelos; ignorarlos es ignorar parte de nuestra dignidad (Catecismo de la Iglesia Católica, 1700).
Cuando dices lo que necesitas, no exiges: te revelas.
Y quien te quiere de verdad sabrá recibirte.