12/07/2020
No sólo con la pareja, en general en nuestras relaciones personales. lo explica: “nuestros vínculos nos hacen quienes somos”.
A veces el motivo de consulta es la conducta del niño y en muchos casos vamos descubriendo que esta conducta es el síntoma que expresa lo que están viviendo los padres como pareja.
Algunos ejemplos:
➡️La dificultad de ponerse de acuerdo sobre el tipo de crianza que quieren llevar. El padre o madre que cree que los golpes y castigos son necesarios habla de sus propias heridas al igual que el que tiene dificultades para poner límites y cae en la permisividad.
➡️Problemas que arrastran de hace tiempo como las dificultades al comunicarse, la distancia emocional entre otros que también son resultado de nuestras heridas, hacen que el nivel de hostilidad o estrés vivido cada día nos alejen de lograr una crianza respetuosa.
Recordemos que la salud mental de los niños se sostiene de la salud mental del adulto.
➡️La falta de involucramiento en las tareas domésticas y de crianza en su mayoría de los padres , hacen que la carga sea más pesada para las madres y volvemos a lo mismo; cuando hay agotamiento se eleva el estrés por lo tanto menos paciencia y sensibilidad para educar.
En fin, hay muchas cuestiones involucradas. La finalidad de este post es invitarte a revisar tu estado emocional, la relación con tu pareja o los que te ayuden con la crianza.
El niño no es agresivo, el niño refleja lo que vive.
El niño no es llorón, el niño puede estar llorando lo que tú no has podido llorar.
Pide ayuda, acude a terapia, sana tus heridas. ❤️
Te abrazo fuerte desde aquí