23/11/2025
Pesticidas tóxicos en frutas y verduras: alarmante hallazgo en mercados de Lima y Callao
Un reciente monitoreo ciudadano reveló que una parte considerable de las frutas y verduras que circulan en Lima y Callao llega a los mercados con residuos de pesticidas altamente peligrosos, incluidos insumos vetados en el Perú y en distintos países por sus efectos severos en la salud.
Los resultados confirmaron que productos que parecen frescos y saludables pueden contener sustancias que superan amplios márgenes de seguridad y que continúan presentes incluso después de lavados y procesos de cocción.
El grupo que impulsó la investigación analizó alimentos de consumo frecuente como espinaca, lechuga, brócoli, cebolla china, apio, pimiento, ají amarillo, duraznos, fresas y manzanas.
Los laboratorios detectaron residuos adheridos a la superficie y también moléculas que ingresaron al tejido del vegetal, lo que impide que los consumidores eliminen los químicos con métodos domésticos.
Especialistas consultados por el movimiento ciudadano explicaron que estas partículas pueden acumularse en órganos internos y causar daños prolongados.
Casos críticos
El vocero técnico que acompañó el estudio remarcó la gravedad del problema y advirtió sobre los riesgos asociados al consumo constante de estos vegetales contaminados.
“A la larga, estas partículas traen consecuencias graves, entre ellas cáncer. También alteran y reducen la fertilidad”, señaló al detallar los hallazgos obtenidos por los laboratorios.
Entre los casos más críticos identificados, una muestra de brócoli adquirida en un supermercado del Callao registró una concentración de clorpirifos 4 900% por encima del límite permitido.
Este insecticida está prohibido en el Perú y también en Estados Unidos, la Unión Europea, Chile, Argentina y Colombia debido a los efectos adversos comprobados sobre la salud.
Otros vegetales
El problema no se limitó a un solo vegetal. Los investigadores reportaron niveles extremos en apios muestreados en distintos puntos de venta.
“Hemos encontrado apios con hasta 26 000% más del límite permitido. Los propios laboratorios se sorprenden del exceso”, indicaron al detallar el procesamiento de las muestras, donde también identificaron entre 700 y 800 moléculas diferentes por análisis.
Además, espinacas compradas en mercados de Lince, Jesús María y Santa Anita presentaron hasta seis agroquímicos distintos incrustados en hojas y tallos.
Mientras tanto, vendedores consultados afirmaron que desconocen si la mercadería que ofrecen contiene sustancias prohibidas y reconocieron que solo se guían por la apariencia del producto.
No obstante, especialistas advierten que ni vinagre, ni sal, ni lavados repetidos eliminan los pesticidas que ya penetraron el vegetal.
Supervisión limitada
Aunque la normativa obliga a las municipalidades a supervisar los productos que ingresan al comercio local, la mayoría no lleva a cabo controles.
La Sociedad Nacional de Industrias advirtió sobre el uso extendido de plaguicidas ilegales y de contrabando en cultivos que abastecen Lima y Callao.
A ello se suma la limitada fiscalización de Senasa en los grandes centros de abasto, como el Gran Mercado Mayorista de Lima, que recibe más de 9 000 toneladas diarias de productos que luego se distribuyen por toda la capital.
Sin un sistema de control eficaz y con agroquímicos capaces de resistir lavado y cocción, frutas y verduras contaminadas continúan desplazándose sin restricciones hacia los hogares de la ciudad. (Expreso).