07/12/2025
¿Te has sentido últimamente como si tu cuerpo estuviera trabajando en tu contra?
Esa sensación de que por más que te cuides, tu abdomen sigue cargando grasa, tu rostro luce más inflamado, te cansas rápido, necesitas siestas, tu mente no para y llegan esos antojos intensos que no puedes controlar…
Todo eso no es “falta de fuerza de voluntad”.
Es tu cuerpo diciendo:
“Mi cortisol está demasiado alto.”
Cuando el cortisol se desbalancea, tu cuerpo activa modo protección:
guarda grasa (sobre todo en el abdomen), aumenta la inflamación, roba energía y hace que bajar de peso se vuelva casi imposible aunque hagas todo bien.
La buena noticia es que sí puedes darle soporte a tu cortisol, y cuando lo haces, notas cambios reales:
✔️ duermes mejor
✔️ baja la inflamación
✔️ disminuyen los antojos
✔️ recuperas energía
✔️ tu cuerpo empieza a soltar el peso
No tienes que seguir empujando sola.
A veces lo único que falta es apoyar la hormona que lo controla todo.
Si quieres saber cómo empezar, te explico con gusto. 💛✨