19/12/2025
El tinnitus crónico podría estar haciendo mucho más que generar un zumbido constante: puede mantener al cuerpo atrapado en un estado permanente de alerta. Un estudio reciente realizado por investigadores de Mass General Brigham y publicado en Science Translational Medicine en 2025 sugiere que, para muchas personas, el tinnitus activa de forma continua los sistemas biológicos asociados a la respuesta de “lucha o huida”.
El equipo comparó a 47 personas con tinnitus o sensibilidad al sonido con 50 individuos sin estas condiciones, utilizando un análisis de alta resolución de microexpresiones faciales y dilatación pupilar mientras escuchaban distintos sonidos, desde risas y música agradable hasta ruidos neutros y alarmas intensas. En quienes no padecían tinnitus, las respuestas faciales y oculares variaban de forma proporcional al contenido emocional del sonido. En cambio, las personas con tinnitus mostraron una respuesta muy distinta: una dilatación exagerada de las pupilas ante casi todos los estímulos auditivos, incluso los neutros, junto con patrones faciales atípicos.
Este perfil fisiológico indica que el cerebro de quienes viven con tinnitus puede estar interpretando sonidos cotidianos como amenazas potenciales, activando de manera crónica los circuitos autonómicos del estrés. Esa hiperactivación sostenida ayuda a explicar por qué el tinnitus suele acompañarse de ansiedad, agotamiento, hipervigilancia y dificultad para relajarse, incluso en ambientes aparentemente tranquilos.
Un hallazgo clave del estudio es que estas señales objetivas —microexpresiones faciales y respuestas pupilares— permitieron no solo diferenciar a los pacientes de tinnitus de los controles, sino también estimar la gravedad de los síntomas. Esto es especialmente relevante porque, hasta ahora, el tinnitus se ha evaluado casi exclusivamente mediante cuestionarios subjetivos. Contar con biomarcadores fisiológicos abre la puerta a diagnósticos más precisos y a tratamientos mejor personalizados.
Estos resultados refuerzan la idea de que el tinnitus no es solo un problema auditivo, sino una condición de todo el organismo, donde los sistemas cerebrales de detección de amenazas quedan desregulados. Entender este mecanismo podría cambiar la forma en que se aborda el tratamiento, poniendo mayor énfasis en regular el sistema nervioso y no únicamente en silenciar el sonido percibido.
Fuente científica:
Smith, S. S., et al. (2025). Objective autonomic signatures of tinnitus and sound sensitivity disorders. Science Translational Medicine, 17, eadp1934.