Sin embargo eses es solo mi nombre. Soy para cada persona alguien en particular, así como cada persona es alguien en particular para mí. Lo que yo sea también depende del momento de la vida en que me conozcan, de las circunstancias particulares que lo acompañan y por supuesto de la historia personal correspondiente. Puedo afirmar con conocimiento de causa que soy hijo de mi madre y de mi padre, nieto de abuelos y abuelas y que han tenido que ocurrir muchas coincidencias en generaciones anteriores – si es que existen – para que yo pueda ver, respirar y experimentar la vida, tal y como lo estoy haciendo. Y créanme, todos los días, doy gracias, reverentemente, por todo ello. He nacido en Alemania, fui educado en 4 países diferentes, poseo algunos títulos que avalan conocimientos – entre ellos uno como psicoterapeuta – pero soy lo suficientemente humilde como para admitir que todos los días aprendo algo nuevo y me asombro con lo que aún ni siquiera intuyo saber. No me jacto de solucionar problemas ajenos, pero creo en la química especial que se produce entre dos personas o más, al tatar de mirar y enfocar un problema o dificultad desde un punto de vista diferente. También he podido comprobar que cada cambio es producto de una experiencia antes que de palabras, pero que se origina sobre todo cuando entendemos e interpretamos esa experiencia satisfactoriamente. Soy simplemente una persona mas que se cruza en tu camino, y que te abre una puerta diferente a la que probablemente tenías pensado abrir.