03/06/2025
🧩 Desde muy chica, mi vida estuvo marcada por un gran motor: mi hermano Joaquín.
👦🏼 Cuando él tenía apenas 4 años, fue diagnosticado con Trastorno del Espectro Autista, y aunque yo todavía estaba en el colegio, me convertí en su principal compañera de juegos y aprendizajes.
👨👩👧👦 Mis padres hicieron todo lo posible: lo llevaron a cada terapia, buscaron todas las alternativas disponibles.
👩🦱 Yo estuve ahí, siempre, trabajando con él en la mesita de casa, aplicando las sugerencias de sus terapeutas, jugando con él y apoyándolo en cada paso. Sin darme cuenta, fui su primera “terapeuta”, su compañera en ese camino.
👩⚕️ En ese proceso, conocí a muchos profesionales de distintas áreas, pero hubo una que me marcó: una fonoaudióloga que me dejó entrar a su consultorio para ver cómo trabajaba.
💡 En ese momento algo hizo clic. Fue como encender una luz que me mostró el camino que quería seguir.
🌟 Ahí supe que quería dedicar mi vida a mejorar la calidad de vida de los niños y sus familias. Que quería ser esa mano amiga que acompaña, guía y transforma.
🎯 Y así fue como descubrí que la fonoaudiología no solo era una carrera: era mi vocación. Hoy, con cada paciente, intento devolver un poco de todo lo que aprendí al lado de mi hermano. Porque, en el fondo, cada niño es como Joaquín: un mundo por descubrir y un motivo para dar lo mejor de mí.
✨ A todos los que me siguen, quiero recordarles que cada niño tiene un potencial único. Nunca subestimen el poder del amor, la empatía y la paciencia para ayudar a cada uno a brillar. Y recuerden que la fonoaudiología nos da las herramientas para ayudarlos a expresarse. ✨