04/09/2025
En ocasiones no podemos controlar lo que ocurre a nuestro alrededor, pero sí tenemos la capacidad de cambiar la forma en la que interpretamos esas experiencias. La psicología nos enseña que no son los acontecimientos en sí mismos los que determinan cómo nos sentimos, sino los pensamientos y creencias que generamos sobre ellos.
Aprender a identificar y cuestionar pensamientos automáticos es un paso fundamental para gestionar la ansiedad, la tristeza o la frustración. Reestructurar la manera en que percibimos una situación nos permite desarrollar recursos internos más saludables, aumentar la confianza en nosotros mismos y elegirnos, incluso cuando sentimos que todo lo demás está fuera de control.
Esto no significa ignorar las emociones, sino reconocerlas, darles un espacio y trabajar con ellas para construir un bienestar más real y duradero.
Referencia:
Beck, J. S. (2020). Terapia cognitivo conductual: Fundamentos y más allá. Bilbao: Desclée De Brouwer.
Ellis, A. & Dryden, W. (2007). The Practice of Rational Emotive Behavior Therapy. Springer Publishing.
✨ Recuerda: aunque no siempre puedas controlar lo externo, sí puedes trabajar en tu manera de pensar y cuidarte a ti mismo.