12/14/2025
Cuando confunden Salud con vanidad .
Hay muchos casos en mi consulta que llegan con enfermedades crónicas, ansiedad, obesidad o agotamiento,
y cuando les pregunto por qué dejaron de cuidarse,
me dicen:
“Porque a Dios no le gusta la vanidad.”
Y me quedo en silencio un momento…
porque entiendo el origen de esa creencia,
pero también veo el daño que hace.
Dios no se glorifica en tu enfermedad,
ni en el abandono de tu cuerpo.
El cuerpo no es un enemigo del alma,
es su casa.
Es el instrumento con el que puedes servir, amar, orar,
abrazar a tus hijos, y cumplir tu propósito.
La vanidad no está en cuidar tu salud,
sino en buscar valor solo en lo externo.
Cuidarte no es vanidad:
es gratitud.
Es decirle a Dios:
“Gracias por esta vida, quiero honrarla, quiero vivirla con energía y plenitud.”
He visto mujeres que confunden resignación con fe,
que creen que comer mal, no moverse o aceptar el dolor constante
es una forma de humildad.
Pero la enfermedad no es virtud.
Jesús sanaba.
Y enseñaba que la sanación es una forma de amor,
porque un cuerpo sano puede amar más, servir más y dar más.
Así que, si estás viva,
cuida tu salud como el regalo más sagrado.
Tu cuerpo no es tu enemigo,
es el templo donde habita Dios.
Y cuidarlo no es vanidad…
es oración en movimiento.
Feliz día ❤️