17/09/2025
Conectar con nuestra esencia es a través del cuerpo físico.
Cuando conectamos profundamente con nuestro cuerpo, lo trascendemos. Todos hemos tenido esta experiencia, pero en general ocurre más inconscientemente que conscientemente. Llevar la conciencia a la sensación sentida de nuestro cuerpo, crea una profundización de la presencia. Es una presencia que va más allá de la identificación con el cuerpo.
Con identificación me refiero a estar atrapado en hábitos mentales y dramas emocionales, que siempre encuentran su expresión en el cuerpo físico. Limita los músculos y la fascia, manteniéndonos aún más identificados con lo que creemos que somos y con nuestros problemas.
En la terapia biodinámica craneosacral conectamos con el cuerpo físico y al mismo tiempo nos orientamos hacia los cuerpos energéticos más sutiles. Cuando una persona tiene dificultades para llegar a un punto de relajación profunda, a menudo aplicamos un trabajo con los tejidos, moviéndolos ligeramente o estirándolos. Esto tiene el potencial no sólo de un alivio físico y emocional, sino también de entrar en estados más profundos de conciencia en los que conectamos más profundamente con nuestro ser.
En estos estados sucede algo divino. Se hace evidente una inteligencia natural e inherente y, como terapeutas, podemos maravillarnos de que se produzca la sanación, simplemente estando presentes y en silencio.
El módulo de la semana pasada trató de eso. Ha sido la primera vez que he integrado el cuerpo de esta manera en el primer año de la formación. Estoy muy contento de cómo fue recibido.
Un agradecimiento especial a los asistentes Guillermo y Leila . Otro agradecimiento especial a Nada .comidaconsciente por acompañar el módulo con su comida y a Casilda por ser una generosa anfitriona.